En medio de una reñida contienda por la dirigencia de Morena y de las recientes modificaciones del Instituto Nacional Electoral (INE), Gibrán Ramírez Reyes, uno de los aspirantes a la presidencia del partido, señaló que las disputas que se han dado durante el proceso de renovación del mismo se originaron cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador abandonó el Partido de la Revolución Democrática (PRD), y las distintas corrientes políticas que se formaron se dieron cuenta del poder que habría en juego en el 2021, comenzado así la pugna por encabezar la dirigencia de Morena. “Se subieron en un primer episodio, un grupo encabezado por la compañera Bertha Luján, y otro por la compañera Yeidckol Polevnsky, chocando persistentemente…”.
En entrevista esta tarde con Javier Alatorre, Ramírez Reyes detalló que, a raíz de la insistencia por parte de Alfonso Ramírez Cuellar, actual dirigente interino de Morena de quedarse en el cargo, se ha desatado un ambiente tenso, con la intervención necesaria del INE para llevar a cabo este proceso que debió realizarse bajo los lineamientos del propio partido.
Con respecto a las empresas privadas que se encargarán de iniciar desde este martes 22 hasta el 28 de septiembre la encuesta de reconocimiento de los cien candidatos, Gibrán Ramírez espera que ante la incertidumbre sobre la metodología que llevarán a cabo las encuestadoras, los medios de comunicación y los ciudadanos realicen una encuesta espejo para corroborar que los resultados sean legítimos y transparentes.
Gibrán Ramírez recalcó que de los aspirantes más conocidos y con una trayectoria más amplia como Mario Delgado o Porfirio Muñoz Ledo, él es el único que pidió licencia a su cargo para buscar la presidencia de Morena. “El único que pidió licencia a su cargo para buscar la presidencia de Morena, y que está buscándola recorriendo por tierra todo el país, desde Chetumal hasta Tijuana donde acabaremos el próximo viernes, he sido yo”, confirmó.