Unos adolescentes encontraron a un recién nacido por casualidad y lograron rescatarlo al borde de una carretera, cuando estaba dentro de una caja con una manta para cubrirlo en la región de Siberia. “Oimos llorar y gritar; pensamos que tal vez alguien había abandonado a unos cachorros, nos acercamos y tras iluminar con una linterna vimos que era un bebé”, dijo uno de los jóvenes.
La menor estuvo expuesto a una temperatura de -20 grados Celsius por al menos tres días. Ahora se recupera en un hospital infantil de Novosibirsk como explica la doctora jefa, Natlia Veka. “A juzgar por la forma en la que el cordón umbilical estaba retorcido, fue un parto casero. El bebé ha permanecido en nuestra unidad especial durante tres días, su estado es satisfactorio”.
Las autoridades han abierto una investigación criminal por intento de asesinato de un menor.