El estadio La Corregidora fue vetado un año, luego de los hechos violentos del sábado pasado durante el juego entre Gallos Blancos y Atlas, los cuales dejaron 26 personas lesionadas, tres de ellas de gravedad. Dentro de los castigos que se determinaron en la asamblea extraordinaria de dueños de este martes, se definió la sanción al inmueble del Club Querétaro, la cual se une también a la desafiliación de la directiva encabezada por Gabriel Solares. “De acuerdo al Artículo 47 del Reglamento de Competencia el Club Gallos Blancos perderá el partido 0-3. Sanción de un año jugando a puerta cerrada todos los partidos de local, independientemente de la sede donde lo hagan”, dijo Yon de Luisa, presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF). “Sanción económica por un millón 500 mil pesos. El grupo de animación está impedido de asistir durante tres años a los juegos de local y un año a los partidos de visitante”, informó.
El equipo de primera división tendrá que jugar sus partidos a puerta cerrada en otro estadio fuera de Querétaro, y ha trascendido que podría ser en Celaya, Irapuato o Toluca. Mientras que el cuadro femenil y los juveniles tendrán sus partidos en las instalaciones de entrenamiento del club.
Si bien el equipo continuará jugando en la Liga MX, la asamblea de dueños determinó que la directiva actual encabezada por Gabriel Solares será desafiliada y suspendida por cinco años para ejercer cualquier cargo dentro del fútbol mexicano.
La franquicia del Club Querétaro regresa a manos de Grupo Caliente, que lo adquirió a principios del 2019, y que tendrá un plazo para poder venderla, ya que además de ser dueño de Xolos también son propietarios de Dorados de Sinaloa de la Liga de Expansión.
Sanción al Club Querétaro y medidas de control contra la violencia en los estadios.
Lee más: https://t.co/rOAQ6srDTL#FMFporNuestroFútbol pic.twitter.com/i2lApgF5EH
— Federación Mexicana de Fútbol (@FMF) March 8, 2022
