Padres de un recién nacido acusaron que médicos de un hospital privado de Mexicali, Baja California, le cortaron la oreja a su bebé durante una cesárea. Según los familiares del menor, la lesión ocurrió cuando el hospital se quedó sin energía eléctrica mientras realizaban la operación a la madre del menor, por lo que los especialistas procedieron a utilizar las lámparas de sus celulares para iluminar el área donde se encontraban trabajando.
Los padres del bebé, Karla Araceli Urizandi y Julián Solís Ortíz, fueron notificados del suceso pero más tarde un médico les informó que el niño nació con un hemangioma (tumor no canceroso), y que por eso le reconstruyeron la oreja, procedimiento que les ahorró un monto de 30 mil pesos.
Debido a los hechos, familiares del bebé presentaron una denuncia por delitos de responsabilidad médica y técnica, o lo que resulte, ante la Fiscalía General de Baja California.