Se despidió de Taiwán Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, concluyendo una polémica visita que, según la demócrata, “reforzó la seguridad de Estados Unidos y compromiso con la democracia” a pesar de la oposición China. La visita de Pelosi la convierte en la legisladora estadounidense de mayor rango en viajar a Taiwán desde 1997, e el viaje a pesar de la advertencia del presidente Joe Biden de que los oficiales militares desaconsejaban hacerlo.
Pelosi y otros miembros de su delegación se reunieron con la presidenta Tsai Ing–wen y otros funcionarios taiwaneses, y visitaron el Museo Nacional de Derechos Humanos de Taiwán, donde tuvieron una mesa redonda con activistas de derechos humanos.
La delegación de Estados Unidos y sus homólogos taiwaneses discutieron una “amplia gama de temas de importancia tanto para Estados Unidos como para Taiwán, que incluyen paz y seguridad, crecimiento económico y comercio, la pandemia de COVID–19, la crisis climática, derechos humanos y democracia”, refiere el comunicado oficial. “Ahora más que nunca, la solidaridad de Estados Unidos con Taiwán es crucial”, dijo Pelosi en un discurso el miércoles durante una reunión con el presidente.
“Hoy, nuestra delegación, de la que estoy muy orgulloso, vino a Taiwán para dejar en claro de manera inequívoca que no abandonaremos nuestro compromiso con Taiwán y estamos orgullosos de nuestra amistad duradera”, agregó Pelosi.
