Aunque no lo crean, las costumbres de matrimonios arreglados siguen en México. Un ejemplo es el de Adriana de 19 años que discutió con su novio de 45 en las calles de la comunidad indígena de Santo Domingo en Atlapexco, Hidalgo.
Él insistía en llevar a cabo la boda pero ella se negó. En medio de la discusión, la joven soltó una cachetada al novio y las autoridades la llevaron a la cárcel por supuestamente alterar el orden. Además, deberá pagar una multa de 60 mil pesos.
Es un reporte de Leonardo Herrera para Hechos.