Perdió su inocencia a los 18 años víctima del líder de tu comunidad indígena. Quedó embarazada, huyó del lugar muerta de miedo, sufrió un aborto espontáneo y fue sentenciada a 13 años de prisión.
Lo que le hicieron a Aurelia es una de las más grandes injusticias en la historia de este país y sucedió en Guerrero.
Es un reporte de Edgar Galicia para Hechos.