“Debí ponerme la maldita vacuna”, escribió Michael Freedy de 39 años, a su pareja antes de morir por COVID-19 en Las Vegas, Estados Unidos. Su pareja, Jessica DuPreez, dijo que su esposo tenía la intención de vacunarse pero quiso esperar y junto con su familia se fue de vacaciones con sus cinco hijos dos días a San Diego, donde contrajo el coronavirus. Al inicio pensaron que Michael Freedy se sentía mal producto de las quemaduras severas por el sol, sin embargo, fue notificado que tenía COVID-19 y, pese a que lo mandaron a su casa, su salud se complicó y tuvo que ser ingresado a un hospital, agravándose tiempo después.
Freedy tenía la oportunidad de estar en comunicación con Jessica a través de llamadas y mensajes, por lo que uno de los últimos, antes de morir, fue: “Debí ponerme la maldita vacuna”.
▶ "Debí ponerme la mald*** vacuna": ese fue uno de los mensajes de Michael Freedy antes de morir de covid-19. Su prometida, Jessica, le contó a CNN por qué decidieron esperar para vacunarse: https://t.co/LjVkf5wbcW
— CNN en Español (@CNNEE) August 4, 2021