En coincidencia con la festividad de Todos los Santos, miles de turistas aprovecharon el fin de semana para visitar la isla española de La Palma atraídos por el volcán de la Cumbre Vieja que, 19 días después de entrar en erupción, sigue en plena actividad y hoy incluso aumentó su producción de lava.
Para este fin de semana las compañías aéreas y marítimas presentaban un completo casi absoluto, y la previsión del sector hostelero era que recibiera en torno a 10 mil visitantes atraídos por las impactantes imágenes del volcán en los medios de comunicación, una cifra recibida con satisfacción por las autoridades ya que da una imagen “segura” de la isla.
Este turismo vulcanológico es en estos momentos la única fuente de ingresos para determinados establecimientos y zonas concretas de La Palma, que se vieron afectados por el impacto del volcán después de empezar a recuperarse de las pérdidas que dejó la pandemia del coronavirus.
Para facilitar la convivencia entre turistas y los servicios de emergencias, el Plan de Emergencia Volcánica de Canarias (Pevolca) restringió el acceso a las carreteras cercanas al volcán, mientras que se ponía en marcha un línea de autobuses desde el antiguo aeropuerto de la isla hasta el conocido como mirador de Tajuya, donde se concentran los visitantes.
"Esto es impresionante, ¿cómo no iba a venir a verlo?". La Palma se llena de turistas en el puente que quieren ver el volcán. Hay tantos que el Cabildo ha habilitado autobuses cada media hora que dejan a los turistas en un mirador concurrido https://t.co/kwkXu4sgb8
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Erupción volcánica en La Palma: entre la emergencia y el turismo. (mn)https://t.co/kON6VimVlz pic.twitter.com/Ls88OqsXra
— DW Español (@dw_espanol) October 29, 2021