- Hallan un sapo de caña gigante en parque de Queensland.
- Lo apodaron “Toadzilla” por su peso de 2.7 kilos.
- El sapo de caña es una amenaza para la fauna en el norte de Australia.
En Australia se registró un inusual descubrimiento para el mundo de la fauna. Se trata de un sapo de caña también conocido como sapo gigante, que pesó 2.7 kilos. El “monstruoso” animal fue hallado por un guardabosques en el Parque Nacional de Conway, en el estado de Queensland, ubicado en el noreste del país. De acuerdo con especialistas, este sapo es una de las especies más tóxicas para otros animales y es considerado una amenaza para la fauna. El guardia Kylee Gray relató como lo encontró: “Me agaché y agarré el sapo de caña y no podía creer lo grande y pesado que era”.
El Departamento de Medio Ambiente y Ciencia de Queensland explicó que algunos sapos de caña, que suelen pesar cerca de 500 gramos, sí pueden llegar a medir 26 centímetros y pesar 2.5 kilos. Aseguró que un ejemplar como el encontrado “se comerá cualquier cosa que le quepa en la boca”, lo que “incluye insectos, reptiles y pequeños mamíferos”.
El sapo de caña encontrado recibió el apodo de “Toadzilla”. Se trata de una hembra y puede ser el sapo más grande registrado por el Museo de Queensland, lugar al que mandaron al ejemplar.
'Toadzilla', el monstruoso sapo australiano de 2,7 kilos https://t.co/9IoKR7cZxD pic.twitter.com/KOb34BSdCh
— EL MUNDO (@elmundoes) January 20, 2023
Amenaza en Australia
Autoridades informaron que “Toadzilla” quedó “removido de la naturaleza” debido a que es considerado una de las mayores amenazas a la fauna de Australia. El sapo de caña, científicamente conocido como “Rhinella marina”, es una especia nativa de América Central y del Sur. Sin embargo en 1935 lo introdujeron a Australia con el fin de acabar con una plaga de escarabajos que azotaba las plantaciones de caña en la región.
Con el tiempo se supo que el sapo no se comió los insectos, y como el lugar no contaba con depredadores naturales para esta especia, se multiplicó sin control. Especialistas consideraron que esta situación ha tenido un grave impacto en los ecosistemas del norte de Australia.
Especialistas indican que con su crecimiento, los sapos de caña han podido evolucionar en diferentes formas y tamaños. Además se mueven lo más lejos y rápido que quieren. Su población aumenta cada vez más en Australia.
En 2017 se contabilizaron más de 1.5 mil millones de sapos en la región norte del país.