- Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal (CCSPJP) presentó el “Ranking 2022 de las 50 ciudades más violentas del mundo”.
- Nueve de las 10 primeras ciudades del Ranking se ubican en México.
- Colima fue la ciudad de más violenta del mundo en el 2022.
El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal (CCSPJP) presentó el “Ranking 2022 de las 50 ciudades más violentas del mundo”. Por sexto año consecutivo, una ciudad mexicana es la más violenta del mundo.
De acuerdo con el presidente de la ONG, José Antonio Ortega, la capital de Colima se ubicó en el primer lugar del 2022. “Por sexto año consecutivo, una ciudad mexicana es la más violenta del mundo. En 2022 esa ciudad mexicana más violenta del mundo fue Colima, en el estado del mismo nombre”, informó Ortega. Dijo además que “la tasa de 181.94 homicidios por cada 100 mil habitantes es la tercera mayor registrada desde que en 2009 iniciamos la investigación de las 50 ciudades más violentas del mundo”.
De las 50 ciudades de la lista, 17 de ubican en México, 10 en Brasil, siete de Estados Unidos, seis en Colombia, cuatro en Sudáfrica, dos en Honduras, y una de Puerto Rico, Haití, Ecuador y Jamaica, respectivamente.
En el ranking 2022, nueve de las diez ciudades más violentas del mundo se encuentran en México:
- Colima, Colima.
- Zamora, Michoacán.
- Ciudad Obregón, Sonora.
- Zacatecas, Zacatecas.
- Tijuana, Baja California.
- Celaya, Guanajuato.
- Uruapan, Michoacán.
- Ciudad Juárez, Chihuahua.
- Acapulco, Guerrero.
La ciudad de Nueva Orleans, en Estados Unidos, que ocupa el octavo sitio, completa la lista de las 10 primeras ciudades más violentas del mundo.
📊 En 2022, nueve de las 10 ciudades más violentas del mundo fueron mexicanas
Colima lidera el ranking con 181.94 homicidios por cada 100,000 habitantes: https://t.co/fiomSW7rmx pic.twitter.com/DkmyLsfsRF
— Forbes México (@Forbes_Mexico) February 20, 2023
Ortega indicó que México sigue siendo insuperable en violencia urbana. “Es el país con mayores número de ciudades violentas: 17 de 50. Además de las ciudades incluidas en el ranking, hay otras mexicanas que no llegan a los 300 mil habitantes, pero tienen tasas por encima de los 100 homicidios por cada 100 mil habitantes, como es el caso de Guaymas y Fresnillo”, declaró.
Violencia en Colima
En los últimos 13 meses, la zona conurbada de Colima y Villa de Álvarez se ha convertido en escenario de múltiples hechos violentos. Esto debido a los enfrentamientos entre grupos criminales. En total, durante el 2022, entre ambos municipios acumularon 581 de los 887 homicidios dolosos registrados. La capital del estado es la más sangrienta con 336 muertos.
La tasa de asesinatos registrada por Colima en el último año “se aproxima a las que prevalecieron en Medellín, Colombia, entre finales de los ochenta y principios de los noventa, debido a la guerra de Pablo Escobar contra el gobierno colombiano para impedir su extradición a Estados Unidos”, dijo José Antonio Ortega.
El panorama para este 2023 se mantiene en la misma ruta, pues la ola de violencia no se detiene. De acuerdo con información del vocero de la Mesa de Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz y la Seguridad de Colima, Javier Almazán Torres, el mes de enero cerró con 70 víctimas de homicidio doloso. Y del primero al nueve de febrero hubo 16 personas asesinadas.
Políticas fallidas
El reporte indica que la situación de violencia de las urbes de México “es el resultado de políticas fallidas aplicadas en lo que va del siglo. Que ha consistido en tolerar la violencia de los grupos criminales y la existencia misma de sus milicias privadas, que desafían el monopolio del Estado sobre la violencia”. Sin embargo, añade, “la peor de esas políticas es la vigente, la del presidente Andrés Manuel López Obrador: ‘Abrazos, no balazos’. No existe antecedente en el mundo de un gobierno nacional que haya adoptado como política de seguridad pública la de dar manos libres a los criminales para que ejerzan violencia y encima lo proclame abiertamente”.
El informe del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal analiza la violencia en las ciudades con más de 300 mil habitantes y sin un “conflicto bélico abierto”.
