En Córdoba, Argentina, una heladería dio la nota con una muestra insólita de apoyo a Ucrania. Un cartel llamó la atención de los vecinos del barrio Cerro de las Rosas: “Disculpe las molestias. Se encuentra suspendida momentáneamente la venta del sabor crema rusa. Muchas gracias”.
Ocurre que en esa sucursal de la reconocida cadena de helados Caseratto, el dueño del negocio decidió tomar partido por el conflicto bélico haciendo lo que tenía a su alcance, que era dejar de vender el sabor de helados que se vincula a Rusia. “Fue una muestra de mi repudio a la guerra”, le dijo a El Doce.